CONVIÉRTETE EN EMOCIONES QUE SE QUEDAN

La mejor definición es que la marca son los sentimientos que tienen las personas cuando entran en contacto contigo y con tu contenido. Las emociones impulsan mucho más que la racionalidad (en una proporción de aproximadamente 10:1); por lo tanto, para crear un vínculo sólido con tus fans y audiencia, pensar y actuar en términos de marcas desbloquea un potencial prácticamente ilimitado de oportunidades, a nivel personal y empresarial.

Recibirás una estrategia y un plan detallados a partir de los cuales podrás crear, comunicar y llegar al mundo de una forma mucho mejor, profesional y emocionalmente eficaz. Saber para qué haces lo que haces y poder comunicarlo adecuadamente es sumamente importante, en un mundo moderno ruidoso donde llamar la atención y ser recordado es un desafío diario.

Tendrá una duración aproximada de dos meses. Cada semana te proporcionaré un conjunto de preguntas y tareas para que las resuelvas, de modo que me permitas guiarte y diseñar la estrategia de marca que más se alinee contigo. Tendremos una sesión por semana para ver los hitos.

Momento de Realidad: la música (tal como la conocíamos) ya no existe como negocio y por ende no es rentable. La inversión que se necesita para producirla y promocionarla ofrece muy pocos beneficios en retorno. Incluso la música en vivo y las giras, a menos que seas una superestrella (para lo cual se necesitó una enorme cantidad de dinero para que despegara), no siempre son tan rentables como parece. Por otro lado, vivimos y caminamos hacia una era en la que una marca personal fuerte puede abrir infinitas formas de monetizar. Las marcas comerciales de todo tipo siempre están buscando colaborar con marcas personales fuertes, porque conocen el sólido vínculo emocional y el impulso que los artistas musicales pueden crear con sus audiencias. Y la asombrosa verdad es que no necesitas tener millones de seguidores antes de monetizar con tu marca. Esto es lo que realmente hace posible vivir de la música. Y no quieres perderte eso.